La peña Camarón de la Isla fue inaugurada después de su muerte, en 1995. Es un edificio de dos plantas, un auténtico museo con centenares de fotos y recuerdos de esta figura del cante flamenco donde también se puede disfrutar de la gastronomía andaluza y de la música y el baile de discípulos de Camarón. Con carácter anual se celebra durante los meses de septiembre a diciembre el Concurso de Cante Memorial Camarón de la Isla.
La Peña Flamenca Camarón de la Isla es el centro neurálgico del flamenco en San Fernando y del flamenco en Cádiz, desde que se fundara en diciembre de 1989 por buenos aficionados al flamenco en la Isla, así como amigos personales del propio José Monge Cruz, Camarón de la Isla. Y no es que la peña sea el referente del flamenco en la Isla así como en toda la provincia de Cádiz, sino por la cantidad de actuaciones y espectáculos que tienen a lo largo del año, ya sea a través de concursos, ciclos o festivales. La peña flamenca Camarón de la Isla tiene espectáculos todos los viernes y sábados del año, y en temporada alta (de junio a septiembre) suele tener recitales los domingos por la mañana. Todos los espectáculos son de entrada libre, para el disfrute y la promoción del flamenco en San Fernando.
Monumento a Camarón de la Isla
Camarón de la Isla vio la luz en el número 29 de la calle del Carmen, en el Barrio de las Callejuelas. Allí se puede ver el origen humilde, con la arquitectura propia de una zona sencilla, de este artista hijo de un gitano herrero. Las callejuelas, es un popular barrio isleño nacido al amparo del primitivo Convento del Carmen. Desde lo alto de sus empinadas calles pueden verse unas vistas únicas de las marismas y salinas del Caño de Sancti Petri, donde tradicionalmente las gentes del barrio mariscaban y pescaban. Este barrio, de tradición marinera, abonan los patios de vecinos. En su casa natal se ha intentado recrear un periodo de tiempo poco conocido en la vida de José, su infancia y juventud, etapas que influyeron en la formación del hombre que se convirtió en un mito universal del flamenco.
Así bien, se trata de un monumento creado por el isleño Antonio Aparicio Mota, autor de otras obras expuestas en la Isla. Está colocado sobre un pedestal de más de dos metros de altura, recubierto de piedra ostionera. Mide alrededor de 1.75 metros y pesa unos 500 kilos, es un solo bloque escultórico que funde el asiento con la persona, dejando a la silla formar parte de la escultura.
Camarón es representado con actitud sosegada, de mirada perdida y concentrada, huyendo de la representación tópica del brazo extendido. Una mano apoyada en la pierna y la otra cuelga en la rodilla izquierda.
En la silla podemos observar texturas expresionistas y figurativas, un cúmulo de formas sintetizan la ciudad de San Fernando, mostrando conchas, canillas… El bronce del niño mide 1,35 metro y pesa unos 60 kilos, es una imagen más cálida y suave, se contrapone con el gesto duro del cantaor.
La creación de este monumento comenzó en junio de 1991 y finaliza en 1992, coincidiendo con la muerte de Camarón, se coloca definitivamente en su actual ubicación en el primer aniversario de la muerte de Camarón en julio de 1993. “Me gustaría que me enterraran en San Fernando” había declarado el cantaor y su deseo se cumplió. En el cementerio municipal se encuentra el mausoleo que siempre congrega a millares de seguidores y siempre está perfumado por las flores que llevan sus incondicionales.
El diseño general de la obra junto con el relieve del Catafalco, que representa una panorámica de la ciudad, es obra del artista isleño Manuel Correa Forero. La escultura de Camarón fue encargada a Alfonso Berraquero García, también de la Isla y los trabajos de forja de hierro a Francisco Fernández de Jerez. El trabajo realizado en piedra, granito verde uva tuba, es obra de Mármoles Aillon de Cádiz y la fundición en bronce de Salteras Sevilla